Supongo que esta vez me toca advertir que la entrada es un poquitín larga. El aire veraniego siempre me tienta a pasar más tiempo al aire libre y mis horas frente al teclado se resienten mucho. También mis horas de lectura se ven afectadas con tantas otras cosas por hacer bajo el sol de verano. Pero aún así, han caído algunos libros en mis manos que, bien me han encantado, o bien prefiero echar a la hoguera.
Veamos en qué saco cae cada uno y aviso de que alguna breve-opinión al final no ha resultado ser tan breve.
Veamos en qué saco cae cada uno y aviso de que alguna breve-opinión al final no ha resultado ser tan breve.
(Madre mía, qué variedad)